La receta que os traigo hoy está inspirada en una receta que vi en Gastronomía & Cía.
La tuve que modificar por varios motivos y me gustó muchísimo cómo quedó.
La remolacha y su sabor dulce, junto con el queso azul, ¡me encantó!
Eso sí, llena muchísimo, no os paséis con las raciones porque de verdad, es contundente.
Y para que lo diga yo, tiene que serlo, ¡jiji!
Como nos gustó tanto, he decidido compartir mi versión con vosotros, claro...
Esta receta se la dedico a Paula (Mi enredadera), que me comentó el otro día que andaba buscando recetas con remolacha y la quiero ayudar... ;-)
Paulita, ésta va por ti, espero que te guste...
Y a los que no conocen aún a Paula (si es que eso es posible), os recomiendo ir a visitarla, veréis qué cositas más ricas cocina...
Ingredientes (5-6 personas):
Para los gnocchi:
2 remolachas cocidas (500 g)
600 g de patata cocida en daditos
200 g de harina
1 huevo
2 cc de nuez moscada
sal
pimienta recién molida
Para la salsa:
200 ml de leche
100 g queso azul (Roquefort, en mi caso)
100 ml de nata para montar
1 cs de Maizena
queso Parmesano recién rallado
semillas de amapola
hojas de albahaca
Receta:
Tritura la remolacha perfectamente pelada y troceada con la batidora hasta obtener un puré fino.
Machaca las patatas cocidas con un tenedor para hacerlas puré y agrégalas al puré de remolacha.
Añade el huevo, mezcla, y luego la harina y la nuez moscada hasta integrar todo.
Salpimienta y mezcla.
Pon agua a hervir.
Ahora, con dos cucharillas, ve formando bolitas de masa de remolacha y conforme las formes, las echas al agua hirviendo. Los gnocchi suben a la superficie cuando estén cocidos. Coges una espumadera y los vas apartando en un colador poco a poco. Repite estos pasos hasta terminar con la masa.
Finalmente, calienta a fuego suave la leche (menos medio vasito) con la nata, el queso azul y un poco de Parmesano rallado.
Aparte, diluye la Maizena con el medio vaso de leche y vuélcalo al resto de salsa.
Mezcla continuamente con unas varillas haya que vaya cogiendo cuerpo.
Cuando tenga la textura adecuada, apaga el fuego.
Para servir, mezcla la pasta con la salsa de queso caliente.
Esparce queso Parmesano recién rallado encima, unas semillitas de amapola y decora con una hoja de albahaca.
¡Unos gnocchi muy originales y sabrosos!