Arroz con leche

Ya no es ningún misterio, ya los sabéis tod@s, soy una persona de gustos sencillos, no me hace falta mucho para disfrutar de las cosas, incluso en lo relativo a la comida.

Eso lo dicen muchos chefs, que donde esté un simple huevo frito con pan o una tostada con aceite, ¡que se quite lo demás!

Y algo de razón tienen, aunque no le hago ascos a la comida gourmet, que conste...

Ahora, si algo no me gusta o no llega a convencerme del todo, prefiero no comerlo a comer algo que no disfrute realmente.

Un ejemplo de ello es el arroz con leche.

Este postre, por muy fácil que parezca, no se hace de la misma manera en España que en Francia.

Lo mismo que aquí suele aromatizarse con limón y canela, en Francia se prepara más bien a la vainilla.

Y yo, el arroz con leche, lo tengo asociado a la vainilla, no al limón y la canela, de modo que nunca me ha convencido el que he comprado o comido por aquí.

Total, que me puse a pensar y se me ocurrió que lo más fácil sería prepararlo yo misma.

Y el mejor intento hasta la fecha ha sido éste.

No os digo que no mejore mi receta algún día pero ésta se aproxima mucho a mi versión perfecta del postre: dulce, untuoso, cremoso, con algo de caldito... ¡Buenísimo!

Por supuesto, la vainilla puede ser sustituida por canela, limón, naranja, cacao, caramelo, crema de cacahuete...

Lo que sí es importante es usar un buen arroz y una buena leche, ya que la receta son básicamente eso y poco más.

El arroz, redondo, tipo bomba, y la leche, fesca y entera.

Con eso y mucho mimo, ¡ya tenéis media receta hecha!

En fin, espero que os guste y que os animéis a preparar este sencillo y delicioso postre.

Ingredientes:

200 g de arroz redondo

1 L de leche entera fresca

200 ml de nata para cocinar (18% m.g.)

1 vaina de vainilla

160 g de azúcar blanco

Receta:

En una cacerola, pon la leche, la nata y la vaina de vainilla abierta y rascada (granitos incluidos) a hervir a fuego medio.

Cuando rompa a hervir, agrega el arroz (sin pasar por agua) en lluvia.

Cuando rompa a hervir de nuevo, baja el fuego al mínimo para que siga hirviendo muy bajito.

Tapa la cacerola dejándola medio abierta sujetando la tapa con una cuchara de palo.

Remueve cada 5-10 minutos durante 20-25 minutos. Prueba si está cocido el arroz.

Si lo está, añade el azúcar y remueve.

Si te gusta con más "caldito", deja 2 minutos más al fuego, sin dejar de remover y apaga el fuego.

Si te gusta más espeso, deja 5-7 minutos más sin dejar de remover y apaga el fuego.

Vuelca enseguida a una fuente y tapa con film en contacto directo con la superficie.

Deja enfriar a temperatura ambiente y conserva en el frigo.

Otra opción para mayor conservación es pasar a unos tarros de mermelada, tapar, darles la vuelta para hacer el vacío de aire y dejar enfriar así.

Variantes:

Con leche de coco y plátano

1 L de leche de coco

200 ml de nata para cocinar (18% m.g.)

1 plátano pequeño maduro

140 g de azúcar blanco

(mismos pasos echando el plátano bien machacado con tenedor justo antes del azúcar)

De pera y jazmín

200 g de arroz redondo

1 L de leche entera fresca

200 ml de nata para cocinar (18% m.g.)

2 bolsitas de infusión de flores de jazmín

1 pera Conferencia madura

140 g de azúcar blanco

(mismos pasos poniendo las bolsas a infusionar en la lecha justo antes de echar el arroz y dejando toda la cocción, y echando la pera recién triturada (sin piel ni troncho) justo antes del azúcar)

De chocolate y amaretto

200 g de arroz redondo

1 L de leche entera fresca

200 ml de nata para cocinar (18% m.g.)

3 cs generosas de cacao puro (Valor)

50 ml de amaretto

160 g de azúcar blanco

(mismos pasos echando y diluyendo el cacao en la leche hirviendo justo antes de echar el arroz, y el amaretto de un golpe junto con el azúcar)

Pues eso... Bon appétit !